Centro de Negocios

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ES TIEMPO DE CRECER!!!

Si usted es empresario y busca hacer que su “negocito” se convierta en un “gran negocio”, le conviene hacer un análisis, organizarse y echar a volar su imaginación con miras a la meta que desea alcanzar. ¿Sabía que los negocios más destacados en el presente no empezaron siendo lo que son hoy? Las empresas como las personas, crecen y se desarrollan; maduran y cambian. Es por eso que este inicio de año que se acerca, es buen momento para analizar con calma, la situación de su negocio.

Antes, respóndase las siguientes preguntas:
¿Tengo claro a qué tipo de clientes estamos llegando?
¿Cuál es mi “ventaja” en el mercado?
¿Qué es lo que vale en mi negocio?
¿A dónde no estoy llegando?
¿Con quién y cómo podría hacer una alianza?



Seguramente cuando usted inició el negocio tenía en mente el objetivo de tener ingresos interesantes por esa actividad. Luego, las cosas se complicaron y poco a poco, pasaron del entusiasmo a la desesperación; comenzaron a aparecer los problemas y usted dejó de ser aquel emprendedor para convertirse en una especie de “apaga fuegos”.
Si usted tiene un negocio es porque supo calibrar los riesgos y tiene el talento para llevarlo a cabo.
Este país no requiere de más empleados, sino de empresarios. Por este motivo, nuestra participación de de hoy está dirigida a que usted logre revisar su situación e implemente las medidas necesarias para desarrollar un mejor negocio.

Si usted tiene claro a qué tipo de cliente está llegando, esta información le da oportunidades en dos sentidos: el primero es que conoce las necesidades de su mercado y esto es muy valioso, porque sabe qué hacer y cómo desarrollar mejor su trabajo entre los consumidores que atiende.
Por otro lado, también la da una orientación de a dónde más puede llegar con la correcta dirección de su esfuerzo; por ejemplo, si usted tiene un negocio que se dedica a la pintura de casas, es importante definir qué tan bien conoce su mercado y qué otras cosas puede hacer con las herramientas y capacidades que ya tienen tanto usted como su personal, para entrar ahora al mercado, por ejemplo, de las impermeabilizaciones.
Cuando un empresario conoce bien a su cliente, lo ayuda a comprar, se anticipa al ciclo de mercado y sabe qué cosas lo satisfacen; entonces, viene el tiempo de una segunda etapa de negocio: comenzar a marcar las pautas de consumo.
Un caso de esto lo conocí cuando un restaurante se había atascado en su crecimiento de desayunos naturales que ofrecía a sus clientes, pues ya conocían el menú. Fue entonces cuando, como medida innovadora, comenzó a dar jugo de kiwi, argumentando que era más sano que el de naranja; esto es una verdad, el jugo de naranja contiene más azúcar y menos antioxidantes que el de kiwi, pero también es más caro; a partir de un argumento simple: la salud, este restaurante se hizo famoso por sus jugos de kiwi y créame, también porque son los más caros desayunos.
Este ejemplo nos sirve para nombrar el caso de las “Ventajas comparativas”. Seguramente usted o su equipo de trabajo tienen una “cosa” que los pone en ventaja con sus competidores; por ejemplo: el conocimiento de la ciudad para hacer reparto, un ingrediente que da un sazón especial a su restaurante o el servicio de su personal. La recomendación es explótela, haga de ella un argumento de venta y su activo más valioso, el sello de su marca y con ella, ¡retome su mercado!
Piense por un momento ¿qué es lo que vale de su negocio? Su negocio, si es un restaurante, no vale por las mesas y sillas, sino por la experiencia que llevan a cabo los comensales y que a su vez, forja su marca. Si usted es dueño de un taller, los equipos no sirven para nada sin la mano de obra adecuada; por esta razón, le recomiendo definir correctamente qué es lo que vale de su negocio.
En cierta ocasión, me tocó ayudar a un empresario a traspasar su negocio y se sorprendió cuando le dije que su negocio cabía en el portafolio que llevaba en esa ocasión, porque lo más importante de su negocio eran su cartera de clientes y la lista de los proveedores que le daban crédito, toda vez que el empresario se había ganado su confianza. Es posible que así esté su negocio.
Finalmente con todo lo que hace único a su producto o servicio y después del análisis, ¿puede hacer alguna alianza?, ¿con quién?, ¿de qué forma?, ¿hacia qué objetivo?; estas preguntas son de vital importancia, porque seguramente lo que usted hace, complementa lo que hace alguien más, sólo es cosa de que ambos se encuentren en el mar de empresas y servicios, ponerse de acuerdo y lograr una sinergia de muchos ceros.

Mario Alberto
Hernández Espinosa
Presidente de MH Consultores
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